Las tropas del emperador Napoleón Bonaparte[1] marchan decididas hacia Versalles mientras escuchan la Eroica Sinfonía nº 3[2] de Beethoven. Allí, en palacio, les esperan dos de los numerosos hermanos músicos Jadin (Hyacinthe[3] y Louis-Emmanuel[4]).

Con los esplendorosos jardines de Versalles como testigos, Louis Emmanuel ejecuta su clavecín mientras Hyacinthe afila su piano. Van a interpretar, con ayuda de otros miembros de su familia, la arrebatadora Fantaisie Concertante in G-minor for harp, piano and orchestra[5]. Para ellos el sol brilla como nunca.

En cambio, para las tropas de Napoleón ha comenzado una olímpica tormenta. Desde el cielo alguien comienza a lanzar truenos. Pero no son Zeus ni Thor quienes los lanzan… ¿Quién es? ¿Serán otros dioses…? “¡No! Es Beethoven”, gritaron en unísono los revolucionarios. Y tatatatá[6]. El destino llamó a la puerta[7]. Cuatro rayos mostraron en pleno cielo atormentado[8] el siguiente mensaje: “¡abandonen a su líder!

Dicho y hecho. Las tropas comenzaron a retirarse de la escena. Mas nuestro emperador, mirando al frente y decidido a ganar, no se percató de su soledad. Así, completamente solo y humillado por Beethoven, se presentó en palacio. Cuando quiso darse cuenta, el fagot de Jean Jadin, padre de los hermanos Hyacinthe y Louis Emmanuel, le apuntaba al corazón. “Hagamos un trato. Jugará usted una partida de ajedrez contra Sakon, nuestra recién inventada máquina. Si gana, con mucho gusto lo coronaremos emperador de Versalles. Pero si pierde… deberá marcharse exiliado a la isla africana de Saint Helena[9].” Con un as bajo la manga, Napoleón no dudó en aceptar, exclamando alto y claro “oh, familia Jadin, comprobarán que mis aclamadas victorias ante Madame de Remusat y el general Bertrand[10] no llegaron por ciencia infusa. No volveré a aquella isla. ¡Derrotaré a vuestra máquina!”.

La partida entre Napoleón y el autómata Sakon[11] resultó ser una de las experiencias menos limpias en la historia de la Galaxia MC. Los observadores neutrales, observando algunas ilegalidades, apuntaron que ambos bandos hicieron importantes trampas. El autómata Sakon jugaba como un auténtico mago[12], mientras que las malas lenguas especularon con que Napoleón recibió la ayuda, mediante señales del cielo, de un fuerte maestro francés[13]. A pesar de las sospechas, la partida no fue interrumpida. Los observadores no hicieron nada por parar tales tretas. Solo concluyeron que debía ganar el más astuto.

La partida terminó de forma dramática para Napoleón, que jugaba con las piezas negras. Defensa francesa, variante del cambio. Batalla igualada con demasiados cambios de piezas. Final teórico de tablas. Napoleón debe saber defender la posición de Philidor[14]. Desafortunadamente… ¡Napoleón nunca revisó los estudios de Philidor[15] por resultarle antipático y monárquico! Así que perdió, dejándose un mate en la octava fila. Le echó la culpa a la mala disposición de las estrellas. Y salió de palacio maldiciendo a Beethoven. “¡Me vengaré de ti cuando no puedas escucharme![16]”

La familia Jadin invitó a Beethoven al banquete de celebración, donde interpretarían la recta Sonata for pianoforte in F sharp minor[17].

Pero el genio de Bonn rechazó la invitación. Él siempre está por encima del bien y del mal.

[1] Napoleón Bonaparte (1769-1821). Francia.

[2] Sinfonía que en un primer momento dedicó Beethoven a Napoleón. Pero cuando Napoleón se coronó emperador, parece ser que Beethoven, con bastante enfado, le quitó la dedicatoria.

[3] Hyacinthe Jadin (1776-1800). Compositor francés.

[4] Louis-Emmanuel Jadin (1768-1853). Compositor francés.

[5] Obra de Louis-Emmanuel Jadin.

[6] Onomatopeya que describe las cuatro primeras notas de la Sinfonía nº 5 de Beethoven.

[7] A ser posible, investigar la historia que se esconde detrás de la Sinfonía nº 5 de Beethoven.

[8] Cielo atormentado (además de tormentoso) porque Beethoven, como buen genio afligido, ha tenido influencia directa sobre este. El lector deberá imaginarse un cielo “preocupado” por el nuevo status imperial de Napoleón.

[9] Isla de África donde Napoleón estuvo retenido en los últimos años de su vida.

[10] En referencia a dos partidas atribuidas a Napoleón.

[11] Autómata inventado. Pero cabe recordar que  Napoleón sí perdió contra el falso autómata El Turco en 1809.

[12] En referencia al módulo de ajedrez Houdini.

[13] Algunos historiadores defienden que algunas partidas atribuidas a Napoleón no fueron jugadas por él, sino inventadas tiempo después para ensalzar su imagen. Yuri Averbakh sostiene que pudo haber sido Pierre-Charles Fournier de Saint-Amant, maestro francés del XIX.

[14] Posición de Philidor. Final de torre contra torre y peón.

[15] François-André Danican Philidor (1726-1795). Compositor francés.

[16] En referencia a la sordera de Beethoven.

[17] Obra de Hyacinthe Jadin.

 

VENCEDOR: Familia Jadin

 

(ChessBoardBerserker)